Seleccionador Catalán y Asesor del nuevo Órgano de Gobierno de la FEP, una semana más ha querido compartir sus siempre interesantes reflexiones con los aficionados a este maravilloso deporte. En esta ocasión, nos hablará sobre la importancia que tiene la relación entre los integrantes de una pareja de pádel.

Padel World Press .- Que nadie se asuste; las matemáticas del pádel, aunque extrañas y contrarias a cualquier cosa que uno pudo aprender en su etapa escolar, son muy sencillas. O así deberían ser… ¡¡Empecemos!!

Todos sabemos que el pádel es un deporte de parejas, o sea, ya tenemos el primer número, el 2. O para ser más exactos el 1+1=2.

Pero aquí comienza el problema, la ‘Twilight Zone’ de nuestro deporte. Aunque parezca imposible 1+1 no siempre suma 2.

Veamos: Hay parejas donde los dos jugadores saben que el mayor rendimiento lo obtendrán potenciando a su compañero. Tanto desde el punto de vista táctico como, y mucho más importante, desde el psicológico. En ese caso, y de forma milagrosa, 1+1>2.

Pero la cosa no acaba ahí. Hay parejas donde el egoísmo, las luces cortas, el vuelo gallináceo y la búsqueda permanente de un culpable de nuestros males deportivos, consiguen que 1+1<2.

Uno, que todavía se acuerda su etapa universitaria (marcada por las matemáticas) recuerda aquel concepto de límite, en referencia al número al que tiende una fórmula al avanzar el tiempo por ejemplo. Pues bien, existen duplas tan autodestructivas en su relación que el límite de su suma puede llegar a ser 0. Son esas parejas en las que cada uno va a su aire e incluso dibujan un gesto de patética complacencia viendo fallar a su compañero. Por no hablar de las rajadas posteriores a los partidos.

Lo curioso del caso es que el extraño mundo de las matemáticas ‘padeleras’ no es patrimonio del jugador principiante o amateur. Algunos profesionales son artistas de esta numerología, para bien o para mal.

Podríamos complicar la ecuación incluyendo en la fórmula a entrenadores, asesores, marcas, papás, mamás, redes sociales… Pero mi cabeza, que tardó muchos años en amueblarse en la universidad, no está preparada para esos cálculos.

Moraleja: el campeón es aquel que, además de extraer lo máximo de sí mismo, extrae lo máximo de su compañero… ¿Fácil, verdad?

Javier Casadesús.

Imagen: World Pádel Tour

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