Puede que no sea el entrenador más conocido para los aficionados al mundo del pádel pero hablar con él es hacerlo con un verdadero torrente de conocimiento, con una persona con la que se podrían estar horas y horas conversando sobre un deporte que se ha convertido en su modo de vida desde hace más de 30 años. Elegido para liderar desde el banquillo el ‘Proyecto Shark War’, tuvimos la oportunidad de saber qué espera de sus dos pupilos.
Padel World Press .- Durante el acto de presentación como pareja para la presente temporada de Matías Díaz y Maxi Sánchez pudimos hablar con el hombre en el que tanto el Guerrero como el Tiburón confiaron para que dirija este nuevo proyecto deportivo… En el que todos ellos depositaron una gran ilusión.
Pese a que iniciaron sus entrenamientos en conjunto hace apenas unas semanas ya que Maxi, haciendo gala a su nombre, apuró al ‘máximo’ su estancia en Argentina, lo cierto es que Severino nos contó que hacía ya varios meses que estaba ‘trabajando’ en su cabeza con estos dos grandes jugadores, a los que espera acompañar en la conquista de grandes y ambiciosas metas: “Me está encantado dirigir a esta pareja. Apenas llevamos unas semanas trabajando juntos pero desde octubre, mes en el que me dijeron que querían trabajar conmigo durante esta temporada, ya comencé a prepararlo todo”.
A lo largo de su carrera, ya había tenido la oportunidad de dirigir a Mati pero nunca antes había coincido con Maxi, un joven jugador en el que tiene una gran confianza: “Ya había trabajado antes con Mati, y sabía qué podía esperar de él. Maxi es un gran profesional, con unas grandes condiciones y estamos trabajando para que sea el nuevo Bela… Estamos apuntando a eso”.
¿Y qué espera de sus dos ‘pupilos’? Una vez más, Severino volvió a demostrar que es una persona con las ideas muy claras: “Mati es un compañero con mayúsculas. No sólo saca el mejor rendimiento de su pareja sino que, además, le permite brillar sin envidias ni egos. Este año, queremos conseguir que el ‘Tiburón’ sea un verdadero depredador”.
Entrenador ‘de la vieja escuela’, se definió de la siguiente manera: “Me considero un entrenador con mucha personalidad. Soy duro con los jugadores, pero siempre tratando de reforzar las características individuales de cada jugador. Me gusta pulir la confianza de los jugadores en cosas que son capaces de conseguir pero que no han logrado hacer por factores exógenos. Maxi ha dicho que le cuesta pegar. Bueno, pues yo voy a explotar al 100% esa faceta y la voy a potenciar”.
Es por eso por lo que destacó que, a nivel de pareja: “Lo fundamental es formar patrones de juego. Lo primero que teníamos que saber con Mati y con Maxi era a qué se iba a jugar y luego, seguirlo ya a rajatabla. En nuestro sistema de trabajo vamos un paso más allá y nos trazamos objetivos más complejos a nivel socio-afectivo, etc”.
Con la promesa de tener una charla más larga y distendida nos despedimos de Severino Iezzi, una de esas personas que derrochan pádel allá por donde pasan.
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