No tiene ninguna duda de que el pádel está hecho a su medida… Y sabe de lo que habla porque, para elegir este maravilloso deporte, antes se hizo incontables largos en una piscina, estuvo siete años encestando canastas y hasta pasó por las pistas de tenis.

Padel World Press .- Como en otros muchos casos, su relación con el pádel se inició por casualidad, en compañía de su familia. Un día fue a ver a sus padres a un partido, cogió la pala y se metió en la pista a pelotear contra la pared. Apenas tenía 12 años y ya supo que ese deporte iba a ser muy importante en su vida.

La facilidad para comenzar a jugar y adquirir un buen nivel, la diversión y el entretenimiento son algunos de los aspectos que más destacaría de un deporte que: “Me llamó la atención y desde la primera vez que entré en la pista me di cuenta de que podía llegar a gustarme más que el tenis, por el tema de las paredes. Y así es. Ahora, me encanta competir porque lo veo elegante y, además, el viajar te permite conocer a muchas personas”.

Su esfuerzo y su deseo de seguir creciendo y mejorando han obtenido su recompensa. Por citar sólo algunos de sus logros, habría que señalar que ha conquistado varios subcampeonatos de TyC Premium y el Campeonato de Andalucía; además de formar parte de la selección andaluza que logró el subcampeonato de España así como del conjunto que logró el triunfo en el Campeonato de España por Equipos Junior… Paso a paso, está cada vez más cerca de hacer realidad su sueño: llegar a Cuadro Principal de una prueba del Circuito World Pádel Tour

En su día a día, estudia 2º de Bachiller (con lo que ya ve muy cerca las pruebas de Selectividad), va a la academia de inglés y se entrenar para las competiciones 4 o 5 días a la semana… Tal y como asegura, poder compaginarlo todo es cuestión de saber organizarse: “Lo que yo hago es aprovechar entre semana para estudiar todo lo posible, ya que muchos fines de semana los paso fuera de casa y los domingos por la tarde, cuando llego a Jaén, los dedico a estudiar.”

Muy arropada por sus padres, Inma destacó que: “Mi familia es un pilar fundamental en mi vida y, como el pádel forma parte de ella, también me apoyan en este deporte. El esfuerzo, la constancia, el compañerismo, el respeto, la entrega, la dedicación… Son valores claves para seguir creciendo como persona y como futura trabajadora, y así ellos me lo hacen ver.”

Con respecto a sus manías, tiene una que quiere hacer desaparecer: y es que una vez que calienta o entra en pista con la pala, ya no la vuelve a soltar… Con la pala agarrada, se prepara para dar el golpe con el que se siente más cómoda y que domina a la perfección: el liftado a la valla lateral… Es por eso por lo que la posición que más le gusta es la de atacante.

Una pala blanda y fácil de manejar, como la Titan Soft White, le proporciona la energía y destreza para seguir creciendo en las pistas. ¿Y cómo la conoció? Pues gracias a las recomendaciones de su compañera, que le animó a que pasara a formar parte del equipo de Cartri: “Estoy encantada porque el trato que tienen con los jugadores es muy cercano y me siento parte y partícipe de esta marca y de este nuevo proyecto”.

Sobre sus referentes, señaló que siente admiración por Patty Llaguno: “Me gusta su talento y su picardía. Creo que es una jugadora que tiene mucha idea, creatividad y cabeza”.

A su vez, no dudó en animar a los jóvenes jugadores a salir a competir por su comunidad y por el resto de España: “Es una experiencia de la que puedes extraer un montón de cosas y, sobre todo, de la que te llevas muchos amigos. Luego, que después prueben con el Circuito Absoluto a ver qué tal les va. Si tienen ilusión y ganas pueden conseguir llegar a donde se propongan”.

Nunca podrá olvidar una divertida anécdota: “Una vez jugamos una Prueba Provincial de Málaga. Nos habíamos apuntado a dos categorías y en las dos llegamos a la final contra las mismas chicas. Total, como había retraso en el torneo porque se disputaban muchas categorías, nosotras dijimos de jugar un partido que valiera por las dos finales, pero nuestras rivales dijeron que querían jugar dos (estaban en su derecho). Disputamos el primer partido, lo ganamos; la gente de fuera creía que ya se iba a proceder a la entrega de premios pero… ¡no! Aún nos faltaba la final de la otra categoría. Finalmente volvimos a ganar y, ahora sí, se hizo la entrega con un público algo desesperado”.

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